Durante los últimos días, el poker online ha sido el tema entre los jugadores norteamericanos. La semana pasada publicamos la legalización en Nevada que podía animar a otros estados a seguir sus pasos y hace un par de días, la reinterpretación por el Department of Justice de la Wire Act que hasta entonces prohibía el juego interestatal y online.
Las reacciones favorables a tales circunstancias no se hicieron esperar. Los grupos de presión mostraron su agradecimiento y su optimismo de cara al futuro. Y las empresas del gremio comenzaron a prepararse para la solicitud de licencias de juego en Nevada.
Pero obviamente no todo podía ser perfecto. Al igual que el “grinch” sabotea la navidad, el ultra conservador estado de Utah no comparte la misma idea recibiendo de muy mala manera este nuevo paso. De hecho, el pasado martes, el congresista republicano Stephen Sandstrom anunció por medio de su sitio web, que ha presentado un proyecto de ley que tiene como objetivo la prohibición del juego online en el estado de Utah. Este “defensor de los valores tradicionales” ha comentado que su proposición es una respuesta a la “voluntad” del Congreso de los EE. UU. de legalizar el juego por Internet.
Si la propuesta de Sandstrom es aprobada por los legisladores en 2012, la nueva legislación no solo prohibirá el juego online, sino que cumplirá con otros de sus objetivos: evitar la instalación de casinos indios en Utah.
El político conservador ha declarado que “muchos críticos del juego han visto la reinterpretación del DoJ (de la Wire Act) como un inmenso perjuicio sobre la moral en América”. Así mismo, ha dicho que “la expansión de la industria del juego es un intento desesperado del gobierno por solucionar la situación económica del país”.
Utah, Hawaii y Washington son los tres estados federales que han mostrado claramente su intención de prohibir el juego online. Mientras tanto, Nevada acelera los trámites para convertirse en el pionero del mercado regulado.
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