Muchas de las personas que juegan al póker, es porque piensan que tarde o temprano van a lograr tener una excelente mano la cual les permitirá ganar mucho dinero. Otros piensan que jugando al póker se convertirán en millonarios si logran calificar y ganar algún torneo importante. Existen muchas razones por las cuales las personas juegan al póker y cada quien tiene sus motivos personales. Este fue el caso de uno los personajes más importantes del país de Estados Unidos de Norteamérica. Esta es la historia del presidente que jugaba póker y como aprovecho sus habilidades en el juego para llegar hasta donde llego.
La historia del presidente Richard Nixon es muy peculiar. Se ha dicho muchas veces que Richard Nixon financio su primera campaña política, con dinero que él había ganado en la Marina de los Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial. Se ha dicho también que muchas de las ganancias de sus juegos de póker, se utilizaron también para su campaña política para llegar al Congreso en 1946. Se ha dicho mucho también sobre la historia del presidente y todas sus ganancias cuando jugaba póker, que este acumulo una enorme fortuna y que el ser Presidente era solo una manera de ocultar su verdadera forma de hacer dinero. Debido a que mucha gente, en ese entonces, veía al póker como un juego del demonio, Richard Nixon tuvo que dejar de jugar al póker para no estropear su carrera política. En 1952, cuando Richard Nixon asumió el puesto de compañero de campana política de Dwight Eisenhower, el declaro que había dejado de jugar y que dedicaría todo tiempo en ayudar a su país natal. Jamás podremos saber si el ex presidente Richard Nixon en realidad dejo de jugar póker. Quien nos puede decir con seguridad, que él no organizaba torneos de póker con sus amigos en la Casa Blanca. Si yo fuera presidente y si jugaba póker, yo definitivamente lo haría.
Una de las frases más celebres de Richard Nixon sobre el juego de póker fue “Aprendí que las personas que tienen buenas cartas son las que menos hablan o susurran; aquellos que no tienen un buen juego son los que hablan en voz alta y se delatan así mismos”
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