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Otro clásico

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Si te gustó el artículo anterior, que titulamos “Eres Pésimo”, seguramente éste también te encantará. El protagonista es Bryce Paradis, también conocido como “Freedom25” o “The_Bryce”, para muchos el mejor exponente en Heads Up del mundo.

El artículo se llama “Buen Poker” y está imperdible. Para todos aquellos que no lo conocíamos, encontrarnos con esta información es absolutamente necesario. Salió hace alrededor de un año en el foro 2 + 2. Disfrútenlo:

Buen Poker

¿Qué necesita una persona para jugar “buen poker”? Incluso los jugadores veteranos podrían darte un amplio rango de opiniones sobre esto. Hay, de todas maneras, una sola correcta definición. El objetivo de un jugador de poker es elegir la estrategia con el mayor valor esperado (EV). Cada decisión en poker tiene dos partes:

1. Hacer una asunción acerca de cuál es la estrategia de tu rival.

2. Elegir la estrategia que tenga más EV basado en lo que has asumido que es la estrategia de tu rival.

Por lo tanto, jugar buen poker es:

“Hacer la asunción más acertada posible acerca de cuál es la estrategia de tu rival, basándote en la información que tienes disponible, y elegir la estrategia con más EV basado en eso”.

Si eres capaz de conseguir ambas cosas podrás esperar ganar el máximo de dinero jugando al poker. El poker es un juego de información incompleta; cuáles sean sus cartas y cuál es su estrategia no están directamente a tu disposición. Aquí tienes algunas cosas que no son parte de un buen juego.

Jugar buen poker no tiene que ver con saber cuáles son exactamente las cartas de tu rival. Imagina que estás jugando No Limit Hold´em con un amigo y te sube all-in. Imagina que sabes que tu amigo sólo haría eso con 2c 3s o AA. Tienes KK y su subida te pone 1:1 con el bote. Deberías tirarte incluso las veces que tiene 2c 3s. En base a lo que sabes, tu rival tendrá 2c 3s un 14% de las veces y AA un 86% (hay más maneras de que la baraja dé a tu amigo AA).

Jugar buen poker implica también no ser clarividente respecto a lo que las acciones de tu rival representan. Imagina que estás jugando contra un rival cuya estrategia es farolear un 20% de las veces que apuesta. Apuesta. ¿Está faroleando? Como en el ejemplo anterior no hay información que te permita distinguir entre las veces que tu rival está faroleando y las veces que no. Sólo sabes que farolea un 20% de las veces, y tú debes elegir tu estrategia en consecuencia.

Por último, jugar buen poker no tiene que ver con la estrategia actual de tu rival. Imagina lo mejor que puedas, que estás jugando al poker por primera vez. Tus primeros 1.000 rivales van all-in con cada mano pre-flop. Tu rival 1.001 se sienta y se le reparte su primera mano. Va all-in. Asumes que es muy probable que haga eso con dos cartas cualesquiera. Decides hacer call con KK. Ocurre que su estrategia era subir all-in sólo con AA, cartas que lleva. Lo que asumiste acerca de su estrategia no era un error; era una asunción perfectamente razonable para ti dada la información disponible. Si hubieras jugado cientos de manos con este rival y de nuevo hubiera ido all-in pre-flop tu asunción habría sido estúpida entonces.

Entonces, ¿cómo se aprende a ser un “buen jugador de poker”? Lo primero que tienes que hacer es darte cuenta de que las dos partes de una decisión de poker son fundamentalmente distintas.

Hacer una asunción acerca de la estrategia de tu rival es un juicio inductivo (intuitivo). En la medida que la estrategia de tu rival es desconocida nunca serás capaz de determinar exactamente cómo de precisas tus asunciones son. Por ejemplo, si ves que tu rival farolea cuatro de cuatro manos no puedes decir, con total seguridad, que su estrategia es farolear siempre. Criticar las conclusiones que obtienes de la información puede ayudarte a asegurar que estás haciendo juicios racionales, de todas maneras. Esto tiende a llevar a asunciones más ajustadas. Es importante que te tomes tiempo para preguntarte cosas acerca de los juicios que haces: ¿cuál información está actualmente disponible? ¿Hay alguna información que podrías haber ignorado? ¿Toda la información que estaba implicada en tu juicio era pertinente? Una evaluación honesta y cuidadosa de tus asunciones te ayudará a asegurarte de que eran lo más ajustadas posible.

Dado que nuestras asunciones están en procesos inductivos tratar de enseñar “buenas asunciones” tiende a ser inefectivo. Mientras que asunciones generales, como “tus rivales probablemente no tirarán reyes pre-flop”, tienden a ser verdaderas, puede ser extremadamente difícil recordar, y dejemos de lado comunicar, todos los factores que intervienen en las asunciones en el poker. Ser capaces de inferir lo que indican las acciones pasadas de tus rivales acerca de las futuras es una habilidad que se desarrolla a través de la experiencia. En consecuencia no suele ser valioso poner mucho énfasis en aconsejarte acerca de lo que debes asumir que tus rivales están haciendo.

Elegir la estrategia con mayor EV, basándote en tus asunciones, es un proceso (lógico) deductivo. Es posible determinar matemáticamente cuál es la EV de una estrategia. Como resultado puedes confiar totalmente en tus decisiones estratégicas. Desafortunadamente determinar cuál es la EV de una estrategia es, a veces, más fácil de decir que de hacer.

Un jugador de poker ideal tendría la capacidad de calcular la EV de cada decisión que toma. De todas maneras, es irracional esperar que los jugadores tendrán esta capacidad. Calcular la EV de una estrategia en las cuatro calles de juego es una tarea inapropiada para hombres. Sería no sólo tremendamente difícil, sino que, además, sería poco práctico. Como resultado de esto muchos jugadores de poker tienden a usar datos empíricos (basados en la experiencia) en lugar de analíticos (basados en la lógica) al tomar decisiones estratégicas. La línea de aprendizaje en el poker puede ser muy inclinada, y muchos jugadores tienden a hacer uso de consejos estratégicos generalizados. Para llegar a ser un buen jugador tienes que entender por qué los consejos generales y los datos empíricos son inferiores al análisis matemático como herramientas para elegir estrategias. Esto te ayudará a hacer un uso responsable de tales herramientas.

Las condiciones bajo las cuales un consejo general es verdadero no son necesariamente las mismas que se dan en el juego que estás jugando. “No debes tirarte ante una apuesta en el river llevando la segunda mejor mano posible” es un consejo perfectamente razonable. En mi experiencia tiende a ser correcta más veces de las que no lo es. De todas maneras, es importante darse cuenta que no hay un vínculo necesario entre que alguien diga que eso es simplemente correcto y que lo sea de hecho. La EV de una estrategia depende de lo que está en riesgo en función de la recompensa potencial y de la probabilidad de que un evento ocurra. Pueden ocurrir situaciones en las que tus rivales elijan estrategias que hacen que este consejo no funcione.

Los consejos generales son útiles y generalmente correctos, y es positivo seguirlos respecto a no hacerlo. El mejor consejo general tiende a intentar ser lo más ajustado posible introduciendo excepciones. De todas maneras, hay demasiadas excepciones. Mientras que un jugador de poker ideal estará de acuerdo con los buenos consejos generales también reconocerá las condiciones bajo las cuales estos consejos no son correctos y elegirá otro camino.

Las conclusiones obtenidas de datos empíricos tienden a generalizarse. Imagina que has abierto el bote subiendo con 76o desde el botón 10.000 veces y obtenido valor de ello. Este dato puede ser usado para sustentar el consejo “debes abrir el bote con una subida con 76o desde el botón”. Sin embargo, date cuenta de que este juicio no está enteramente justificado por los datos usados. No todas las condiciones que se pueden dar en un juego están tenidas en cuenta dados esos datos (tu estrategia y la de tus rivales, por ejemplo). Este consejo es una generalización. La conclusión es una suposición justificada. Al usar datos empíricos para tomar decisiones estratégicas es importante que estés atento de qué te dicen y qué no los datos.

Sería (hipotéticamente) posible enumerar un gran número de estrategias potenciales de tus rivales y usar el análisis matemático para resolver las contra-estrategias óptimas para cada una. De nuevo, esto sería extremadamente poco práctico, tanto para el profesor como para el aprendiz. La gente no da consejos generales porque sean teoréticamente ideales; los dan porque son prácticos y son herramientas para enseñar relativamente buen, aunque imperfecto, poker. Los entrenadores deberían estar atentos de las deficiencias de los consejos generales y usarlos de una manera inteligente y efectiva.

Los jugadores muy nuevos están advertidos de mantenerse dentro de los cauces de los consejos generales que se les dan, a menos de que tengan poderosas razones de que deben actuar de otra manera. Estos jugadores deben reconocer, de todas maneras, que su objetivo es el de llegar a ser jugadores de poker maduros que tengan la capacidad necesaria para determinar si están tomando decisiones estratégicas inteligentes por ellos mismos. El método más rápido, más efectivo, para hacer eso es siendo capaces de calcular la EV de las estrategias simples. Esto requiere cierta solvencia con la matemática del poker.

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