Actitud mental en el poker

La ambición mata al hombre y la intimidación hace lo mismo, ten una buena actitud mental

El poker es un juego de situaciones, y hay muchos factores que influyen a la hora de tomar la decisión correcta en cada momento. La intuición general, el saber hacer, la pericia, nacen del espíritu ganador en su conjunto, todo nuestro sitio trata acerca de este tema, aquí daremos solo un primer paso.

El estudio de la actitud mental necesaria para jugar al poker es algo que deja importantes enseñanzas para todos los deportes y aunque no suele ser bien visto el juego que se desarrolla por dinero, dejaremos de lado esa valoración y nos abocaremos a su interesante análisis psicológico. Acerca de la pregunta si el poker constituye un deporte, entendemos que no necesariamente, pero lo que le falta de porte (movimiento, traslación física) lo tiene de estrategia mental, de hecho las cadenas de televisión de deportes como ESPN lo han incorporado dentro de sus programaciones habituales. Nosotros, por nuestra parte continuaremos con nuestro método de Psicología Comparada de los Deportes donde por Semejanzas y diferencias por contraste exploraremos las cualidades propias de la mente de un campeón.

En el ajedrez se recomienda permanentemente: no juegue contra el hombre, juegue contra el tablero , ya que todo lo que hay que saber o deducir sobre el otro está allí. En cambio en el poker las cartas están ocultas y hay que enfocar al jugador contrario (semblanteo) y a sus jugadas anteriores (historial) El juego se base en lo que uno calcula que tiene el otro y lo que el otro supone que uno tiene. Es decir que, como muchos deportes, es un juego de inteligencia y contrainteligencia.

A fin de organizar su estudio dividiremos la actitud en tres vertientes:

1.- Control emocional
2.- Impenetrabilidad
3.- Semblanteo

Control Emocional

Es la base del juego, si el jugador es impulsivo o ansioso, está perdido. Hay que tener paciencia y sobre todo saber perder para poder ganar. Existen malas manos y malas rachas, hay que convivir con esto y si no se puede, es mejor salir de la mesa.

Juegan en contra la impaciencia o ansiedad,
la impulsividad o la ambición desmedida.

El jugador deberá mantener una actitud mental de espectador, desapegado lo más posible, aceptando simplemente la evidencia y la realidad independientemente de sus deseos. Nuestra Indiferencia Instrumental postula una actitud de espectador indiferente en el sentido emocional y actor eficiente en sentido mental. La ambición mata al hombre y la intimidación hace lo mismo.

Impenetrabilidad

Corresponde al camuflaje de situaciones. El buen jugador no solo es impermeable, brinda sutiles señales de desorientación.

No solo comprende mantener una actitud de indiferencia cualesquiera sean las cartas que vengan, sino también variabilidad e innovación en cada mano para que no puedan semblantearnos ni hacer un historial que determine nuestra tendencia de juego o el tipo de jugador que somos. Los arqueros de fútbol hacen hoy un historial de los tiradores de penales y conocen sus tendencias de ejecución.

Semblanteo

Los roles de cazador y presa constituyen la base de los deportes y de muchos juegos. Entonces, el primer paso a tener en cuenta es realizar un estudio de con quienes vamos a jugar, ya que así como las leonas cazan en grupo, podríamos caer en las garras de timadores profesionales que juegan en equipo. Hay un caso conocido en el cual un grupo de estafadores viajaba en distintos asientos de tren a lugares turísticos que demandaban largas horas de viaje. Como quien no quiere la cosa uno de ellos preguntaba si alguien quería jugar a los naipes para matar el tiempo y los cómplices, que simulaban no conocerse entre sí, se iban acoplando al juego hasta encontrar a un candidato al que paulatinamente desplumaban del dinero de sus vacaciones. Ya que sabían jugar a todos los juegos de cartas, podían concretar su estafa por medio del poker, del truco (muy argentino) o el tute.

Una película de cine basa su argumento en un truco muy interesante de cambio de realidad. Un estafador propone a un candidato timar a un jugador apostando mucho dinero. Éste debía apostar solo cuando repartiera el supuesto cómplice, pero estaban todos arreglados y en una mano otro, que el candidato creía ajeno, reparte cartas y le da un poker, éste apuesta todo pensando que es su día de suerte, pero le habían dado escalera real a un cuarto. Al terminar la partida el estafador le reprocha a su socio que se salió de las reglas, ya que sólo debía apostar cuando repartiera el supuesto cómplice; pero en realidad era un engaño de todos contra él, creyéndose cazador resultó ser la presa.

El semblanteo, inteligencia y contrainteligencia sobre el rival son herramientas esenciales. En una experiencia realizada en una Universidad de Estados Unidos se reunió a eximios jugadores de póker que debían observar una serie de láminas sin demostrar ninguna emoción. Iban realizando la prueba hasta en una de las tarjetas aparecía una muy atractiva señorita tal como vino al mundo y en una posición sumamente inquietante, no movieron un solo músculo facial, pero se les dilataron levemente las pupilas. Un avezado jugador de cartas me comentaba que el uso de las clásicas viseras no es para la luz sino para ocultar los ojos bajando la cabeza cuando se reciben las cartas. Solo se levanta la vista cuando el jugador se ha repuesto de la alegría o frustración que le causaron los naipes recibidos, los ojos expresan emociones y no tienen control voluntario, por lo que pueden ser leídos por los rivales, recordamos que cuando una mujer quiere saber algo del hombre le pide que la mire a los ojos.

Es importante determinar con que tipo de jugador se enfrenta en cada apuesta.

Y también pensar en que categoría se encuentra usted, que relación tiene con su personalidad o con otras conductas de su vida y que puede hacer para introducir una variabilidad a efecto que no lo cataloguen y le tomen el tiempo.

Tipología de los jugadores

Fish: (pescado) es el mal jugador de poker. Tiene un juego inocente o comete muchos errores.

Conservador: tiene que estar seguro para apostar, es previsible.

Agresivo: tiende a intimidar, es difícil determinar cuando tiene o cuando no, pero puede quedar pagando.

Alocado: Gana y pierde con mucha facilidad. El juego se termina cuando pierde todo

Experto: Si al cabo de media hora de estar jugando usted no puede deducir nada quiere decir que el otro es bueno o muy bueno

Una última recomendación: Existen algunas zonas donde el rival (enemigo) interior se hace muy firme, uno de ellos es el juego por dinero, existen personas sumamente inteligentes que han visto desbastada su economía y por arrastre su vida familiar por problemas con el juego, cuando alguien empieza a traspasar sus límites y lentamente va perdiendo el control estamos ante un jugador compulsivo. Opinamos: en vez de gastar su dinero en el juego invierta en un buen psicólogo …..y va a ganar seguro.